Antes de iniciar un tratamiento con inmunoterapia contra el cáncer, es fundamental realizar una serie de exámenes que permiten evaluar tu estado general de salud y determinar si este tipo de tratamiento es adecuado para ti. Estos estudios ayudan a los médicos a tomar decisiones más seguras y personalizadas.
Principales exámenes que se solicitan
- Exámenes de sangre: Se revisan valores como glóbulos blancos, hemoglobina, plaquetas, función hepática y renal. Esto permite conocer si tu cuerpo está en condiciones de recibir el tratamiento.
- Pruebas de biomarcadores: Algunos tipos de inmunoterapia requieren identificar marcadores específicos, como el PD-L1 o alteraciones genéticas. Estos se estudian en muestras del tumor.
- Imágenes médicas: Tomografías, resonancias o PET-CT ayudan a conocer la localización y extensión del cáncer, y sirven como punto de comparación durante el tratamiento.
- Evaluación clínica completa: Tu historial médico, síntomas actuales y otras condiciones deben ser evaluadas para garantizar la seguridad del tratamiento.
Estos exámenes no solo permiten confirmar si eres candidato a la inmunoterapia, sino que también ayudan a anticipar posibles efectos secundarios y a diseñar un plan de tratamiento personalizado.
Consulta con tu oncólogo sobre qué estudios específicos necesitas, ya que pueden variar según el tipo de cáncer, tu edad y tu estado general.
Recuerda: la preparación es el primer paso hacia un tratamiento exitoso.