Sí, en muchos casos sí puedes.
Recibir inmunoterapia después de tratamientos como quimioterapia o radioterapia es una opción posible y común en varios tipos de cáncer. Todo dependerá del tipo de cáncer que tengas, tu estado general de salud y cómo haya respondido tu cuerpo a los tratamientos previos.
¿Por qué se usa inmunoterapia después de otros tratamientos?
La inmunoterapia ayuda a activar tu propio sistema inmunológico para que reconozca y ataque las células cancerosas. A veces, se utiliza después de la quimioterapia o radioterapia porque:
- El cáncer no desapareció por completo.
- Existe riesgo de que el cáncer regrese.
- El sistema inmunológico puede estar más preparado para actuar.
¿Todos los pacientes pueden hacerlo?
No todos, pero sí muchos. Esta decisión debe ser tomada por tu equipo médico, basándose en:
- Tu historia clínica.
- El tipo y estadio del cáncer.
- Tus análisis y estado de salud actual.
Beneficios potenciales
- Puede ayudarte a mantener el control del cáncer.
- En algunos casos, logra respuestas duraderas.
- Tiene un perfil de efectos secundarios diferente al de la quimioterapia.
Consulta con tu oncólogo
Cada paciente es único. Por eso, si ya tuviste quimioterapia o radioterapia y estás considerando la inmunoterapia, habla con tu oncólogo. Juntos podrán analizar si es el momento adecuado para incluir este tratamiento en tu camino de recuperación.
La lucha contra el cáncer no siempre sigue una sola vía. Hoy en día, la inmunoterapia representa una esperanza real, incluso para quienes ya recibieron otros tratamientos.